22 de agosto de 2009

El dolor es de quien lo siente.

Cuando alguien te dice que no eres la única persona que tiene problemas en este mundo, en el caso de que te vean triste, quejumbroso, inconforme, mal humurado, deprimido, cansado, etc etc, no es ni en lo más mínimo un consuelo, ni tampoco el que esos problemas ajenos sean a según, mayores o mas gachos que los tuyos. ¿Porqué lo pienso? Pues porque tus sufrimientos y penas son únicos, como lo eres tu, como lo son todos. Cuando se trata de dolores me vuelvo egoísta, porque son mios nomás y no requiero de compararlos con los de los demás para sentirme mejor. No funciona.

Cuando hablamos de sufrimiento, nadie ni nada puede comprobar qué se siente, si es mucho o poquito, si es menos o si es más. Porque esas penas, son propias. Y no es que no crea que los demás no sufren, que no sientan o que no sean importantes. ¿Quién puede medir el sufrimiento, el dolor, la agonía, el desconsuelo, la soledad? Únicamente quien las tiene.

Así que, no creo en esa estrategia para que cortes de tajo el dolor, pares de llorar o te sientas mejor, al saber que hay quienes tienen problemas peores o más grandes que tú, no al menos cuando lo padeces. El dolor es de quien lo siente.

1 comentario:

Wendy Música dijo...

hey, pues increíblemente no había dado con tu blog o al menos no lo tenía en mi lista de blogs. En este momento te agregaré...

y espero estarte leyendo más seguido...

saludos :)