23 de julio de 2009

¡Pues si tu eres casado!

'Deveritas que en esta viña del señor hay de todo', 'Qué pequeño es el mundo', 'Chihuahua rancho grande'...y otras tantas frasesitas se me vinieron a la mente como la de 'entre tanto cabrón tuvimos que venir a toparnos con éste'...porque el viernesito pasado, que salí con mi amiga, acá la Dianis, fueron perfectamente a la ocasión.

La Dianis, muy contentita iba a conocer a un chamaco, que sabrá dónde y cuándo, entrelazó en interné. El tipo este, ya le hablaba de corazones y amores, sin siquiera haberle visto aún el escote y ya la había invitado a salir un par de veces antes, quedándonos mal y en una ocasión donde extrañamente lo agarron y le metieron el carro al corralón mientras el chamaco venía de Aldama de hacer unos 'negocios'.

Perfumadas y toda la cosa, llegamos al antro, si, esos lugares de los cuales no gusto mucho, y despues de intentos por saber dónde estaba el tipo, llamadas y mensajes, llegó por nosotras a la barra. Lo ví y si, era él, ni modo que me hubieran hecho una réplica exactita...Dianis nos presentó y se me salió decir: 'Si yo a este ya lo conozco...si hasta a su boda fuí' Miss discresión, ya se la saben.

A mi cabecita loca llegó el pensamiento de tener que advertirle a mi incauta amiguita, pero la vi tan contentita que mejor me esperé un ratito.
El susodicho no tardó mucho para tratarme como tal, como alguien a quien ya conocía, y algo bien.

-Wao! cómo has cambiado Alesita, si ni te reconocí.
-Ah, mira, si los años no pasan en vano...pero tu te ves igualito.
-No sabes, ya no estoy casado [haciendo muecas de que ni se me ocurra verlo como matrimoniado] ya me separé y hasta la escuela estoy por terminar.
-Achis, achis...mira lo que son las cosas. Recuerdo re te bien que fui tu madrina de anillos y el accidente que nos pasó un día al llegar a tu open house. Qué rapido se pasaron 4 años.
-Si, así es...pero tu sigues igual de cabrona...no cambias.

Lo peor para él fué haberse topado con quien ya lo conoce, en apenas comienzo de conquista, qué malo que Alejandra sea amiguita de Diana, ya no se la va a echar al plato tan fácil. ¡Qué pena le ha de haber dado al pobre! Si pa' cabrones, pues cabronas y media. Intentaba bajo argumentos extraños decirme que ya no hablara más del asunto de que es o fué casado, de que lo conozco por sus malos ratos y por aquellos tiempos de debraye. Total a mi sólo me impresionó lo que son las cosas y la simpática coincidencia, lo demás va por cuenta de Diana.

Lo admito, este tipo y yo tenemos pasado...y claramente no hubiera deseado que Diana se deshinibiera con tal ejemplar de pirujin, pero aquella supo como sacarle provecho despues de que le conté de dónde y porqué conocía al hombre.

Viejo truco aquel de que está separado o justa la vida que siempre hace pagar los errores.

La noche, a pesar del antro y de mis tacones apretados, fué buena...whiskyto y baile sabrosón, Diana consiguió lo que quería y nosotras contentas.

¡Qué suerte! y qué pequeño Chihuahua...

22 de julio de 2009

Se han preguntado antes ¿qué tan rápido pasa el tiempo?. De seguro muchas veces...y pasa mas rápido cuando estamos ocupados dicen, pero yo digo que tambien de no hacer nada el tiempo te consume, más que cuando siempre tienes algo que hacer. El tiempo no perdona, eso tambien lo hemos escuchado muchas veces...pero en realidad le hacemos caso? Cuántas veces, maldita sea, hemos tenido en la cabeza hacer algo, por muy simple que sea, y sabrá la madre porqué no lo hacemos, lo postergamos o jamás lo llevamos a cabo...cuando pasa ese tiempo, justo el necesario en el que nos damos cuenta que mas que invertirlo lo tiramos a la basura es cuando más nos duele. Y no digo que estar de webón sea malo, no, pero estarlo siempre si perjudica...o bueno, podremos no estar tirando barra, pero el no hacer eso que queremos es más gacho.

No sé porqué, en las vacaciones regularmente, cuando no se tiene mucho que hacer por las mañanas [o eso creemos] es cuando por la noche se me prende el foco y me dan ganas de hacer harta cosa...no pues si, como si a las 12 de la noche pudiese ir a comprar fieltro para hacer un monito [por poner un ejemplo, no crean]. Me da el sindrome de la familia vampiro.

Yo si me arrepiento de pasar las horas y las horas frente a este artefacto maligno y seductor que es mi computadora, pero siempre digo lo mismo: no tengo otra cosa que hacer. ¡Y no es cierto! méndigo vicio... Pero me arrepiento y claudico, qué le hago.

Aunque dicen que por servir se acaba y sí...

Lo prometo, prometo dedicar mi tiempo al sano esparcimiento, aunque sea a ver más la tele. ¡Jua!

20 de julio de 2009

Se siente medio feo, eso que ni qué, saber que no estas bien, que las cosas que haces, dices, sientes o hasta piensas no son exactamente lo mejor que pudieses hacer, decir, sentir y pensar. Es como si no estuviera en tus manos, como movimientos involuntarios, cuando menos te das cuenta, ya la regaste, ya pasó eso que ni siquiera querías y que no te ayuda.

No es agradable y por mucho, mas bien es degenerativo, destructivo. Yo no era así. No lo era. Yo era feliz, lo intentaba...yo no era así.